Además de la abolición de la esclavitud, dedicó gran parte de su tiempo a la Guerra Civil Estadounidense (1861-1865) que provocó miles de muertos. Se ocupó personalmente de elegir los mejores generales, algo que fue clave para el final del conflicto. Lincoln consiguió movilizar a la opinión pública a través de sus míticos discursos. Un claro ejemplo fue el famoso discurso de Gettysburg (1863 en el contexto de la Guerra Civil): discurso Gettysburg.
Este discurso supuso un punto de inflexión en la guerra, que finalizaría poco tiempo después. Lamentablemente Lincoln, fue asesinado después de su reelección, pero de lo que no cabe duda, es que Estados Unidos le debe mucho a este líder que supo dirigir un cambio tan importante y que tantas heridas causaba, como el de la abolición de la esclavitud.
Una de sus principales características de líder fue su capacidad de romper el status quo.